Paris Roubaix: A Sunday in Hell

Como españolito medio y de mediana edad crecí con Perico y Lejarreta subiendo los Lagos, Tourmalet y Alpe D`Huez. Ignorando el otro ciclismo, el de las clásicas. Y han tenido que pasar casi 4 décadas para darme cuenta de que lo mejor del ciclismo me lo había perdido. Tampoco es culpa mía del todo, seguramente de aquella era chino mandarín seguir las clásicas. Pero ahora con Eurosport y Youtube es de gilipollas no hacerlo. Con perdón.

Así que empecé a aficionarme viendo antiguas ediciones del Tour de Flandes ya que al menos había alguna cuesta. Continué con la Strade Bianche, Lieja-Bastogne-Liege. Incluso alguna insípida Milán-San Remo ya que al menos estaba el Poggio cerca de la menta. Pero mis prejuicios se resistían a la Paris-Roubaix, una competición totalmente plana. Eso será pa sprinters. Menudo coñazo. ¿Infierno del norte? Será cuando llueve.

Como me aburría haciendo bici estática me dio por enchufar en youtube alguna París-Roubaix y subir la resistencia cada vez que llegaban al pavés. Menudo imbécil, jeje. Si encima tienes la suerte de que una de esas carreras que ves es la de Tommeke contra el resto del mundo atacando a muchos kilómentros del final, entonces no ves la hora de que llegue la próxima París-Roubaix para disfrutarla desde el km 0 o al menos desde que empieza el mariachi, es decir, el temible adoquín.

Ya habrá tiempo de homenajear a Tommeke pero seguro que muchos de vosotros tenéis ganas de ver al gran Eddy Mercks o a Francesco Moser en plena faena. Para ganar la París Roubaix tienes que sortear más obstáculos que en ninguna otra carrera. En primer lugar estar como un burru, y después todo lo demás: esquivar caídas, pinchazos, luchando contra el polvo o el barro, y hasta manifestaciones y la caravana como veremos en este espectacular documental de 1976. Y sin casco eh.

Está en inglés, así que a los que lo estudiéis os vendrá de cine para practicar listening.




Gracias al youtuber Walrusrider por compartir esta joya.